Este título se presenta de forma inminente en Kickstarter.
En LOOP, encontramos una simulación de vida sencilla pero con un buen mensaje de fondo.
Diseñador/a: | Cyril Lee, Kenneth YWN |
Ilustrador/a: | Cyril Lee |
Editorial: | Blackbody Lab |
Idioma: | Inglés |
Número de jugadores: | 1-6 |
Duración: | 15-90 min |
Edad mínima recomendada: | 13+ |
¿CÓMO SE JUEGA?
En LOOP: Life of ordinary people encontramos un juego en el que el objetivo de cada jugador es llevar a cabo una vida entera. Por el camino, como no podía ser de otra manera, cada jugador tendrá sus metas y éstas deberán irse completando si queremos ser plenamente felices, o algo que se parezca a ello.
El juego nos permite tres modos de juego bien diferenciados pero con un núcleo de reglas comunes que pasaremos a explicar a continuación. Como esquema, el turno tiene el siguiente formato:
En un turno el jugador activo debe llevar a cabo solo una de las tres acciones posibles que contaremos a continuación. Antes de eso, si no tiene cinco cartas de FAVOR, robaría una. De estas cartas hablaremos luego, pero son la principal fuente de interacción de LOOP.
Las tres opciones posibles son:
TRABAJAR
En LOOP todos tendremos un trabajo desde el inicio de la partida. Mientras que en su modo básico somos meros becarios, con sueldos bajos y un funcionamiento sencillo, en partidas avanzadas recibiremos un par de trabajos totalmente asimétricos para que podamos elegir a cuál queremos interpretar.
Con la acción de trabajar tan solo tenemos que bajarnos un punto de felicidad para recibir tantas monedas como nuestro trabajo nos ofrezca. De esta manera, y como referencia, un becario recibe tres monedas. En resumidas cuentas, mina tu felicidad a cambio de cuatro duros, algo que en muchos casos traduce la realidad.
COMPRAR
¿Para qué trabajar si luego no te compras un Tesla? Si elegimos esta opción podremos gastar el dinero que hemos obtenido con el sudor de nuestra frente para adquirir materias. El consumismo puro, vaya.
En LOOP hay cinco tipos de material, representados por colores. Por cada moneda invertida podremos obtener un material y, pagando adicionalmente, podremos mejorar su calidad, representada por los puntos de la cara superior de la carta. Estos materiales son imprescindibles para llevar a cabo actividades, con la única meta de cumplir metas en la vida, de las que hablaremos en breves.
CONSUMIR
Esta tercera y última opción nos permite restar materiales para llevar a cabo actividades. Para pagar estas actividades, las cuales tendremos en el tablero central, debemos tener los materiales que ésta requiera.
Las actividades siempre tienen un coste de dos materiales, por lo que deberemos tener los colores correspondientes y reducir en un paso su calidad. Si algún material pasara a tener un valor de cero, tan solo deberemos retirarlo de la zona superior de nuestro tablero a nuestra zona de reciclaje, de la que hablaremos luego.
Las actividades nos ofrecen unos iconos cuya intención es completar los requisitos de las metas en nuestra vida. Cada jugador empieza la partida con tres metas que son una fuente de puntos diferencial. Cada actividad completada nos otorga un punto de felicidad, pero las metas nos darán más felicidad puesto que son más complicadas de completar.
Como vemos más arriba, solo tenemos capacidad para tres actividades, por lo que se requiere de cierta programación para acabar consiguiendo los iconos que pidan nuestras metas. Si fuera posible, con las mismas actividades podríamos completar más de una meta.
Completar metas es totalmente opcional, y lo natural es hacerlo cuando tengas los requisitos correspondientes para ello, ya que las actividades de tu tablero irán cambiando a lo largo de una partida.
También es opcional usar las cartas de FAVOR, las cuales pueden usarse en cualquier momento de tu turno y son, como ya avanzábamos antes, una fuente de interacción entre jugadores. Bajo nombres claramente temáticos como compartir, adquirir, revender o reciclar, los jugadores usan estas cartas sobre sus rivales. Esto permite intercambiar materiales o gastar algunos que no sean suyos a cambio de que el contrincante que se vea afectado acepte y reciba algunos puntos de reputación. Si, por lo contrario, no quisiera recibir este efecto, el contrincante puede evitar este trato pagando un punto de la reputación recién nombrada, o descartando una carta de su mano que coincida con el favor. Esta reputación podremos usarla en turnos posteriores para potenciar las tres acciones comentadas más arriba: ya sea aumentando la calidad de los materiales comprados, ganando más dinero en nuestra acción de trabajar o aumentando en uno la felicidad obtenida al completar una actividad.
Esta mecánica además de interactiva puede modificarse mediante un potencial circuito cerrado de cartas, ya que si el jugador acepta el favor no solo recibe reputación, sino que obtiene la carta para, posteriormente, poder usarla de nuevo. Con esta mecánica de autorregulación los jugadores pueden tener partidas más o menos interactivas, dependiendo si deciden o no aceptar estos tratos. Un efecto negativo en un buen momento puede ser positivo para el jugador que sale “perjudicado” con el favor.
La partida termina cuando alguien llegue a la cantidad de felicidad establecida, que en el modo básico es 12 puntos, o cuando se agotan los materiales, en cuyo caso el jugador que haya desencadenado esta depleción será penalizado restándose un punto de felicidad.
Como hemos comentado, esto resume el modo básico, pero en LOOP encontramos un modo competitivo, que añade elementos interesantes y un grado de asimetría y profundidad, mientras que también hay un modo cooperativo y solitario. ¡Nada mal!
¿QUÉ ME PARECE?
LOOP es uno de esos juegos que te gana por la temática y el estilo gráfico con fuerte personalidad, que esconde un buen mensaje y deja en segundo plano unas mecánicas, que aunque están bien engrasadas, no vienen a romper los moldes de lo establecido. Una experiencia agradable que pretende emular una vida a veces rutinaria y con una marcada influencia del consumismo.
Si algo llama la atención en este LOOP es, para empezar, todo lo que rodea a las mecánicas. Empezamos con un título original que juega con las siglas mismas para hacernos ver como en muchas ocasiones la vida es un bucle en el que trabajamos, recibimos, gastamos e intentamos cumplir metas. Para un mensaje tan existencialista usan un estilo gráfico muy particular, cuyas ilustraciones suelen ser de un solo o muy pocos trazos, solo con siluetas, olvidándose casi totalmente del color. Un estilo sobrio, funcional, pero original y elegante, en mi opinión.
Las mecánicas de LOOP no sorprenden, basándose en la gestión de recursos y unos objetivos ocultos, en esencia, aunque la interacción de las cartas de favor es interesante por lo que genera de forma indirecta. Estas cartas no solo nos permiten aprovecharnos de otros, sino que entra en juego la reputación. Esta interacción tiene un punto oportunista y hace que los jugadores afectados negativamente puedan, a veces, valorar aceptar ese cambio para recibir la reputación y la carta empleada. Recordemos que las cartas de favor cambian mucho de mano durante la partida, pero que dependerá de los jugadores si quieren tener una buena variedad en su mano, para lo que no tenemos límite, o rechazar todas las posibles a costa de estar siempre sin reputación pero poder contar con la seguridad de que los materiales son suyos y están a buen recaudo.
Los modos de juego son interesantes. Mientras que el juego básico añade una campaña de pocas cartas que va introduciendo ligeros cambios mientras nos transporta a unos años futuros, con un mensaje anticapitalista, también encontramos un modo cooperativo y solitario.
El modo que más he disfrutado es el competitivo, especialmente por el uso de las cartas de favor. A ese modo descrito arriba podemos añadirle profesiones asimétricas, altamente recomendadas, y algunos elementos nuevos de juego como las tarjetas de crédito que nos permiten obtener ingresos puntualmente a cambio de tener que, evidentemente, pagar una comisión. Este temático elemento permite flexibilizar los turnos y, a cambio de una ligera penalización, poder adelantar a otros jugadores en esta carrera en busca de la felicidad.
Su modo cooperativo simplemente propone que todos los jugadores se ayuden a aspirar a la felicidad establecida como objetivo, mientras que el solitario es una carrera contra ti mismo. En ambos modos, los favores se usan con efectos distintos a los expuestos arriba y algunos personajes están vetados en ciertos modos de juego.
Debemos comentar que aunque el estilo gráfico es agradable, la copia de LOOP recibida es un prototipo previo a la campaña de mecenazgo que está a punto de empezar. Aunque las calidades no son definitivas, provienen de un origen sostenible y estamos convencidos de que no representan la calidad final de producción.
Por todo ello, es un proyecto que me llamó la atención por su propuesta. Para los que busquen mecánicas rompedoras no es su título, pero los que busquen una experiencia con trasfondo, que puede ser jugado con jugones en su primera adolescencia y que transmite un mensaje ideológico de un modo elegante. Sin duda es un título a tener en cuenta, que no se olvida de ofrecer varios modos de juego y la posibilidad de expandirse mediante campañas y retos para su modo solitario, que estoy convencido de que será financiado por su originalidad en su forma, aunque sus engranajes giren de un modo conservador a nivel mecánico.
Pros
- Una temática original y trascendental, que se ha implementado de forma fantástica.
- Estilo gráfico potente y con mucha personalidad.
- Una interacción agradable y no destructiva.
- Varios modos de juego que reutilizan la mayoría de componentes.
Contras
- Mecánicamente no destaca por su originalidad, siendo conservador pero bien hilado.
Este juego ha sido cedido por Blackbody Lab para poder redactar la reseña así como tomar las fotos. Gracias por el detalle.
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Meeple sano in corpore sano.
Doctor Meeple es el alter ego de Sergi, médico de día y jugón a tiempo completo. En esta afición he encontrado un espacio en el que recrearme haciendo fotografías de detalle y evadirme moviendo cubos, algo que pretendo plasmar en cada una de las entradas que encontraréis aquí y en otras redes. ¡Nos vemos por las mesas!