Hoy nos pararemos ni estando dormidos…
En Dream Runners tenemos un juego de creación de patrones original y contrarreloj.
Diseñador/a: | Joan Dufour |
Ilustrador/a: | Jade Mosch |
Editorial: | Zacatrus |
Idioma: | Español |
Número de jugadores: | 2-4 |
Duración: | 30-40 min |
Edad mínima recomendada: | 8+ |
¿DE QUÉ VA?
Los sueños se están volviendo peligrosos últimamente. Es por eso que deberás explorar tus creaciones oníricas, evitar las pesadillas y recoger lo mejor de ellos. ¡Sé rápido si quieres conservar la serenidad de tus noches!
¿CÓMO SE JUEGA?
En Dream Runners los jugadores se enfrentarán a una serie de sueños en los que deberán recrear un patrón de 3*3 para intentar ahuyentar pesadillas y recoger los recursos que necesiten. ¡Todo ello bajo la presión de que en cualquier momento alguien girará el reloj de arena!
Cada jugador empieza con dos monedas y un set de losetas iniciales para poder encarar los primeros sueños. Durante la partida los jugadores podrán comprar más losetas que mejoren sus iniciales o les den más variabilidad, pero también perderlas si no ahuyentan a algunos monstruos.
En cada una de las rondas, se levantará un sueño que todos los jugadores deberán superar. Para ello, sin turnos establecidos, cada jugador intentará formar su parrilla de 3*3 intentando hacer dos acciones principalmente:
Con las losetas que cada jugador posea, y sin tener que usarlas todas, deberán intentar recoger todo lo que puedan y ahuyentar a los monstruos que, dicho sea de paso, serán más frecuentes a medida que avance la partida.
El primero en componer su sueño obtiene una moneda y gira el reloj de arena. Eso hace que el resto de jugadores solo tenga 30 segundos para acabar su composición y que cada ronda tenga una duración finita.
Ser el primero en acabar no es sinónimo de ganar, ya que una vez cogido el reloj no podremos recomponer y el resto de rivales puede darle una vuelta más a como superar el resto que el sueño nos propone.
En el ejemplo superior vemos que el jugador se ha excedido del 3*3, por lo que perderá un punto. Por suerte ha cazado a tres de los cuatro monstruos, pero la serpiente de abajo a la derecha queda libre y le hará perder dos puntos. Con sus acciones de recoger obtiene monedas, un fragmento gris y, como vemos en la casilla amarilla, un botín más jugoso del que hablaremos a continuación. ¡Nada mal!
Ni todos los monstruos son iguales ni los botines son siempre para uno mismo. Encontramos enemigos que nos restan más puntos si no los ahuyentamos, o que incluso nos pueden hacer perder piezas. En cuanto a botines, tenemos algunos sencillos, pero también hay botines comunes, con fondo amarillo como vemos arriba, que deberemos compartir con el resto de jugadores que haya usado recoger sobre esa misma casilla. Finalmente, encontramos cofres en forma de huevo, una mina de recursos que requiere que antes de recogerlos tengamos las suficientes llaves:
En Dream Runners encontramos sueños de distintos niveles, que irán apareciendo a medida que se avancen las rondas. De esta manera, más nos vale obtener nuevas losetas para poder combatir más monstruos o ser más flexibles componiendo.
Antes de revelar el siguiente sueño los jugadores pueden invertir sus monedas. Con las monedas podremos subir el track de serenidad, el cual irá bajando con fallos de composición como el que hemos visto más arriba o si no ahuyentamos a todos los monstruos. También podremos adquirir losetas nuevas, algo muy necesario para poder encarar los sueños de nivel 2 en adelante. ¡No escatimes en eso!
Durante la partida intentaremos obtener el máximo de puntos de victoria, siendo especialmente eficiente obtener fragmentos de sueño en los cuatro colores para poder avanzar en un marcador de puntos que otorga una gran cantidad de ellos:
Al final del último sueño el jugador con más puntos de victoria será el ganador. ¡Es hora de despertar!
¿QUÉ ME PARECE?
Dream Runners es otro título que Ankama ha sabido traer con un aspecto visual atrapante y que esconde un reto apto para los más pequeños pero que puede sacar de quicio a los más grandes.
Si algo me sorprendió al leer acerca del juego era su edad mínima recomendada. Aunque sean 8 los añitos mínimos, es un juego que se disfrutará igualmente en mesas de adultos, eso os lo aseguro. Las reglas del juego más básicas son comprensibles e integrables por niños, pero la pericia a la hora de formar patrones tiene mucho camino por delante.
Sin lugar a duda, Ankama sabe cuidar sus productos y Dream Runners no es una excepción: encontramos un apartado gráfico precioso, colorido y saturado, que hace que sea utilitario y vistoso a partes iguales. Han usado un estilo muy detallista, lleno de animales que nos transportan a una fantasía mitológica que encaja en la temática. A esto añadimos un inserto personalizado muy bien organizado que, por desgracia, requiere que mantengas la caja en horizontal para no mandar los componentes a una marea de cartón.
Las reglas de Dream Runners son sencillas, pero tienen sus excepciones que lo hacen interesante sin salirse de la complejidad apta para los más pequeños. La complejidad reside en el puzzle que cada ronda nos propone y que, dicho sea de paso, se irá complicando a medida que avancen las rondas. En este sentido se agradecen este estilo de juegos que funcionan más como un puzle, como ya pasaba en Globe Twister (su reseña aquí), que como la creación de patrones que vemos en otros juegos de losetas más eurogame.
Y es que la creciente dificultad es algo que desde fuera ofrece cierto desarrollo, dándole sentido al número de rondas que ofrece una partida pero que, a su vez, hace que sea un juego que penaliza a los que no son tan habilidosos jugando. En Dream Runners en una mala ronda podemos perder puntos, no ganar monedas, e incluso perder losetas. Todo eso hace que los peores de la mesa puedan tener todavía menos oportunidades en la ronda siguiente, que puede tender a un efecto bola de nieve preocupante. El añadido del reloj de arena no le hace ningún favor a este apartado, ya que empeora y pone bajo presión a aquellos que menos dominen la creación de patrones propuesta.
Para solventar el punto anterior lo mejor es jugar con otros que controlen las reglas del juego y tengan cierta habilidad. Es por eso que aunque el juego pueda ir encarado al público infantil, cualquier edad es buena siempre que no se mezclen grandes extremos que puedan detonar el final de la ronda con el reloj de arena de forma prematura.
En definitiva, Dream Runners propone una creación de patrones interesante bajo una producción colorida. Nos propone cierto desarrollo, adquisición de nuevas losetas y poder mirar a un par de rondas vista, pero a su vez cuenta con una forma de puntuar algo cruel, que penaliza a los que peores patrones creen. Pese a eso, en una mesa en el que la habilidad o la edad de los jugadores sea pareja, puedes encontrar un juego original y muy desafiante, que brillaría más si no fuera por esa tendencia a la bola de nieve.
Pros
- Creación de patrones fresca con un elemento contrarreloj.
- Un apartado artístico cuidado.
- Título infantil pero que puede funcionar igual de bien con adultos.
Contras
- Penaliza en exceso a los menos habilidosos.
Este juego ha sido cedido por Zacatrus para poder redactar la reseña así como tomar las fotos. Gracias por el detalle.
Artículos relacionados
Meeple sano in corpore sano.
Doctor Meeple es el alter ego de Sergi, médico de día y jugón a tiempo completo. En esta afición he encontrado un espacio en el que recrearme haciendo fotografías de detalle y evadirme moviendo cubos, algo que pretendo plasmar en cada una de las entradas que encontraréis aquí y en otras redes. ¡Nos vemos por las mesas!