Por fin llega la fecha más señalada del año a nivel lúdico. El periplo empezaba a medianoche y, tras unas horas de autobús, un vuelo, y más ferrocarriles germánicos, acabamos llegando a Essen.

¿Que no se puede hacer el check-in? Pues nada, dejamos los bártulos y nos vamos al Messe, que por primera vez teníamos la capacidad de entrar antes que la mayoría, y eso hay que aprovecharlo.

Llueve, pero poco nos importa cuando nos cubrimos bajo el techo de la feria, solamente interrumpida por las galerías entre los numerosos halls. ¡Ya estamos aquí! Aunque a partir de mañana nos tomaremos las cosas con más calma, hoy os queremos mostrar todo lo que hemos podido ver y lo poco que nos hemos parado a probar.

Al poco de entrar nos dirijimos a ver el rincón más nacional de la zona, encontrándonos las novedades de GenXGames que podremos probar pronto y nuestro querido Shikoku expuesto (aquí su reseña), con bastantes interesados revoloteando a su alrededor.

No podíamos alejarnos mucho del stand de Osprey sin echarle un ojo a su novedoso Cryptid, un juego el que los jugadores deben cooperar, aportando información de la mejor manera posible, para encontrar la localización del monstruo en el mapa. Más abstracto de lo que puede parecer, nos parece una propuesta original que estamos convencidos de que vendrá para casa.

Bien cerca encontrábamos la expansión de The Lost Expedition (aquí su reseña), la cual pudimos ver filtrada en la pasada UKGE y que también caerá. Una idea de Peer Sylvester junto a tales ilustraciones es difícil de rechazar, especialmente con los módulos añadidos en esta expansión de caja pequeña.

Y antes de irnos le echamos un par de fotos a Wildlands, ese proyecto de Wallace con más plástico que ninguno de sus otros títulos. Dentro de un juego de escaramuzas promete darle un sabor a eurogame que, hasta que no lo probemos, no lo acabamos de imaginar. Eso sí, os lo traeremos al blog en cuanto podamos y lo afotaremos como es debido. Osprey mantiene, además de en sus producciones, una gran calidad en sus miniaturas.

Mindclash mostraba con orgullo una copia final de Cerebria. La editorial de los euros durillos y vistosos parece que ha conseguido sacar otro atrevido proyecto en cuanto a temática y con una presencia en mesa que vale la pena observar. No solo tendrán a la venta su versión de mesa, que Maldito traerá a nuestro país, sino que podremos adquirir su versión de cartas, que acabará cayendo en nuestra maleta con casi total probabilidad.

Para no variar su tónica habitual marcada con su juego de los exotrajes, en Cerebria contamos con unas miniaturas tan bien elaboradas como morfológicamente originales. ¿Pensábais que no nos lo íbamos a llevar?

Los holandeses de BlackBox Adventures ya tienen a la venta Itchy Monkey, su juego de control de área más parasitario. En este simpático juego encontramos, además de coloridas ilustraciones como las que ya nos mostraron en Frutti di Mare (aquí su reseña), un tema original en un juego de mayorías en el que la interacción está asegurada a través de los traviesos piojos.

También pudimos ver la copia final de UBOOT, el juego cooperativo del submarino que tanto nos gustó probar el pasado Essen. Por fin vemos una muestra del producto que llegará a todos los que hayan participado en su arrolladora campaña de mecenazgo. Aunque por el momento no entrará en casa, especialmente por tratarse de un juego asimétrico que requiere de varias partidas para poder coger con soltura todas las funciones que el equipo deberá llevar a cabo si quieren aspirar a la victoria.

The Cousin’s War (aquí su reseña) está siendo editado por segunda vez. El juego para parejas con una de las mejores portadas de Klemens Franz, que pronto traerá 2Tomatoes a nuestro país, cuenta con algunos cambios respecto a su primera tirada. Nos sorprende ver el aumento de tamaño en algunos componentes como el mapa y las cartas, pero también nos gusta el formato tan liviano que mostraba nuestra copia. ¿Le tenéis ganas? Es un gran añadido contar con su mini expansión incluida, ofreciendo un mayor abanico de cartas.

No hace mucho hablábamos de la edición de coleccionista del clásico Pandemic. Su desorbitado precio se justifica con su descripción «de coleccionista». En vivo hemos podido ver un artículo de excelentes acabados pero que dificilmente justifican su precio. ¡Solo para los amantes del título que le añaden al precio un valor sentimental!

No pudimos pasar de largo al ver Discover, ese juego en el que cada caja tendrá un contenido diferente. Nos hemos reído bastante al pensar que hemos hecho fotos a uno de los posibles componentes que tendrá el juego que compremos, pero desde luego es un juego que nos intriga más por su formato y variabilidad entre cajas que por otra cosa. Ese elemento ya lo hace diferente y habrá que ver lo bien que se defiende y si las diferencias entre grupos de juego son significativas. ¡En breves nos llega en castellano!

¿Os suena Magic Fold? A nosotros nos recuerda demasiado a Fold It con algo más de trasfondo. Pese a que vemos un tablero y algún componente más, queda claro que este juego se parece demasiado al juego de doblar a gran velocidad el mantelito de colores, ¿no?

Cerca del anterior pudimos ver la nueva versión de La Danza del Huevo, Crazy Eggz, de nuestro querido Roberto Fraga. Esta nueva edición oriental contiene una huevera clásica pero unos huevos de lo más agradables. Ya sabemos que su distribución por Mercurio en España es inminente. ¡Este cae seguro!

Farmer Olaf nos llamó la atención por su pequeña caja y su peculiar formato. Marcin nos contaba como, en esta primera incursión en los juegos de mesa, se propuso diseñar un juego sencillo de reglas que pudiera ser entendido por los más pequeños y que no requiriera de una mesa para jugar. Por ello mismo, el juego propone la caja como almacenamiento de todo lo que vayamos usando, pudiendo ser jugado en una pequeña mesa o, si te va lo acrobático, sujetando la caja con una mano. Independientemente de esto, ya os contaremos en su reseña que tal funciona este juego de gestión de mano y comercio.

Ofreciéndonos una serpiente de gominola gigante captaron nuestra atención para Space Escape, lo nuevo de Leacock. El autor de Pandemic ha diseñado un juego familiar, quizás en exceso, en el que deberemos gestionar nuestras cartas para desplazar a los cuatro astronautas sin que sean cazados por las temibles serpientes. ¡Cuidado con las escaleras y toboganes! El juego se ve vistoso, pero con la explicación nos dejó bastante fríos…

¡Otra expansión para Magic Maze! (aquí su reseña) Aunque ya van dos, y no nos gusta expandir tanto los juegos…a excepción de todo lo que lleve Horror o Mansiones en su título, se trata de una vuelta de tuerca interesante.  Siguiendo el formato de campaña, introduciendo de forma creciente las nuevas normas, nos encontramos con una expansión que incluye el rol de traidor entre los jugadores. ¡Terrible! Un juego que, pese a ser cooperativo, llevaba a discusiones por la necesidad de funcionar de forma sincronizada con el resto de jugadores, ahora incluye un malo en el equipo. ¡Esperamos que los tomates lo traigan pronto en español!


Los reyes de las cajas pequeñas, OINK Games, nos muestran varias novedades. A destacar este Moneybags, otro juego sencillo en sus mecánicas y brillante en su originalidad y producción. Aquí nos enseñan un juego que viene con unas preciosas monedas y unas bolsas de tela, razón que causa que su caja tenga mayor grosor que sus diseños previos, y que se basa en el faroleo y, en cierto modo, forzar nuestra suerte. El juego, a grosso modo, se basa en robar a otros jugadores y añadir las monedas a nuestra bolsa, la cual no podremos ni mirar ni palpar, pero sí coger la bolsa por los extremos para pesar su contenido y poder predecir si somos los más ricos del lugar. Si creemos serlo, cerramos la bolsa para avisar a nuestros rivales y, si estuviéramos en lo cierto, habríamos ganado. ¡Cuidado porque un diamante de plástico vale por diez y pesa menos que una moneda! En definitiva, otro microjuego que promete darnos unas risas y buenos momentos sin ocupar mucho espacio en la Kallax.

Gemblo nos llamó su atención con el plástico y el tema de Marble Bobsleigh. De lo más estrambótico que hemos visto hoy, aunque también de lo que más ganas nos ha dejado por poder probar, al menos durante un par de partidas. No os extrañe que se venga para casa…

A las 3, y sin haber comido todavía, nos dirigimos al stand de DLP donde Reiner Stockhausen había citado a todos los que quisieran charlar un rato acerca de sus lanzamientos. Aunque Valparaíso nos robó el corazón, Manitoba nos intriga por su temática. El propio Reiner nos confirmó que ya está en proceso de cerrar algún trato para poder editar estos juegos en español. ¿Arrakis, eres tú?

Después de comer algo en el propio recinto, nos adelantamos al mañana para comprar algo que el año pasado se nos escapó. Por fin tenemos un Food Chain Magnate en nuestras manos. PD: Splotter haz tiradas más grandes, no te hagas la interesante. ¡Que ganazas de probarlo! Para redondear el precio compramos KIEK, un juego del 1999, que cumple años ahora y que se aleja de todo lo editado por ellos. En este juego deberemos deducir a través de imágenes y asociarlas a categorías. A ver que tal funciona eso dos décadas después.

A última hora quedamos con Robert de Pleasant Company para poder probar su demo del siguiente proyecto de la editorial sudafricana. Se trata de The Dead Eye, un título bastante alejado de lo anteriormente publicado. Se trata de un juego de cartas solitario, que transmite las sensaciones de un puzzle y que nos sitúa en un entorno postapocalíptico de lo más ochentero. Aquí los colores se vuelven amarillentos y el synthwave se mezcla con unas ilustraciones que gozan de un efecto 3D del que disfrutaremos con las gafas. Como viene pasando en estos juegos tan rompecabezas, nos ha dado la sensación de que es un juego poco controlable. Por otra parte, cabe decir que es un juego que el propio editor refiere que requiere de un par de partidas para empezar a saborear todas las repercusiones que guardan nuestras decisiones que, aunque dicotómicas, pueden ser difíciles. Hemos jugado una partida, sentados junto a un editor español el cual podría interesarse por esta editorial que, por el momento, no tiene presencia en nuestro país. Sin dejarnos fríos, consideramos que necesitamos jugar más a un juego que, por el hecho de ser solitario, va a tener un nicho menor de clientes que sus proyectos anteriores. ¡Pronto saldrá en campaña de mecenazgo, así que estad atentos!

Antes de salir de la feria no pudimos evitar pasar por CMON a ver la «miniatura» del primigenio más famoso del mundo. Debemos decir lo mucho que nos ha gustado el acabado de la figura, como el del resto del plástico de Cthulhu: Death May Die. Nos gusta Lovecraft pero, por el momento, no tenemos espacio ni ganas de invertir tanto en un juego de este corte. Nos quedamos con nuestro Mansiones de la Locura.

Esto ha sido un poco nuestro recorrido en un día muy loco. Tras una noche sin sueño alguno ni ganas por perder las horas en el hotel, hemos decidido llevar a cabo esta incursión poco detallada pero muy abundante en las propuestas de este año. Sin mucha perspectiva, siendo nuestro segundo año en esta gran feria, vemos que las novedades afloran de forma exagerada y tememos no poder abarcarlo todo. Sea como sea, se intentará y os lo iremos contando.

¡Cambiamos y cortamos la retransmisión!